No pidas estudios ni trates a niños con introversión tibial.
No indicar radiografías ni aconsejar soportes ortopédicos o cirugía a niños menores de 8 años con marcha en intraversión (dedos de los pies hacia dentro).
El leve contacto de los dedos del pie suele ser un fenómeno fisiológico que refleja la maduración continua del esqueleto.
El metatarso en aducción, la anteversión femoral y la torsión tibial contribuyen al cuadro y en la gran mayoría mejoran con el crecimiento.
El simple monitoreo clínico de la marcha del niño a intervalos regulares es adecuado hasta los 7-8 años de edad, a menos que haya tropezones, caídas o asimetría.
No es posible alterar la evolución natural usando fisioterapia, aparatos ortopédicos o plantillas para zapatos.
http://www.choosingwisely.org/clinician-lists/aap-posna-bracing-or-surgery-for-child-under-8-with-simple-in-toeing-gait/