El rastreo del STC grupo B en el embarazo.
El rastreo se realiza por recolección de muestras de frotis rectovaginales entre las 35 y 37 semanas de gestación, que se procesan utilizando medios de cultivo
selectivos para identificar a las mujeres colonizadas con GBS.
El examen de detección comenzó en 1966 y se ofrece a todas las mujeres embarazadas a término.
La mayoría de los países que recomiendan la detección han visto una reducción o estabilización similar en la incidencia de la enfermedad de inicio
temprano.
Dado que sólo un pequeño porcentaje de neonatos nacidos de mujeres colonizadas con STC B se infectan, el programa de detección propuesto haría que muchas
mujeres sean elegibles para la profilaxis cuyos bebés no desarrollarían una infección de inicio temprano si no se las tratara.
Según los datos del Reino Unido, el cultivo prenatal predeciría correctamente la infección de inicio temprano en aproximadamente
2 de cada 1000 mujeres embarazadas (0.2%) con un resultado positivo (Ver Fig. 1).
¿Qué sucedió mientras el rastreo era general?
En 2000-01, sin una guía de prevención nacional,
126.159 mujeres embarazadas a término fueron colonizadas con STC B, de ellas, sólo 205 recién nacidos a término desarrollaron una infección de inicio
temprano, lo que significa que la detección habría conducido a un tratamiento excesivo de 125.954 (99,8%) mujeres en trabajo de parto.
¿Qué sucedió cuando el rastreo se realizó a población de riesgo?
De manera similar, en 2014-15, bajo prevención de riesgo,
138 933 mujeres embarazadas a término fueron colonizadas con STC B, pero sólo 350 recién nacidos a término desarrollaron una infección de inicio temprano,
lo que significa que el examen hubiera conducido a un tratamiento excesivo de 138 583 (99.75%) mujeres en trabajo de parto. (Ver Figura)
