Cannabis en el dolor

El BMJ acaba de publicar una  guía  realizada por un panel de expertos sobre el papel del cannabis medicinal en el dolor crónico.

El mismo es común y angustiante y se asocia con una carga socioeconómica considerable a nivel mundial. 

El cannabis medicinal se utiliza cada vez más para controlar el dolor crónico, particularmente en los países que han promulgado

políticas para reducir el uso de opioides; sin embargo, las recomendaciones de las guías existentes son inconsistentes, y el

cannabis sigue siendo ilegal para uso terapéutico en muchos países.

 

Recomendación 

 

El panel de expertos de la guía emitió una recomendación débil para ofrecer un ensayo de cannabis medicinal no inhalado o

cannabinoides, además de la atención y el tratamiento estándar (si no es suficiente), para las personas que viven con cáncer crónico o

dolor no relacionado con el cáncer.

 

Cómo se creó esta guía 

 

Un panel internacional de desarrollo de guías que incluye pacientes, médicos con experiencia en contenido y metodólogos produjo

esta recomendación de acuerdo con los estándares para pautas confiables utilizando el enfoque GRADE. 

 

El  MAGIC Evidence Ecosystem Foundation (MAGIC) proporcionó apoyo metodológico. El panel aplicó una perspectiva individual del paciente.

 

 

La evidencia 

 

Esta recomendación se basa en una serie vinculada de cuatro revisiones sistemáticas que resumen el cuerpo actual de evidencia

de efectos beneficiosos y perjudiciales, así como los valores y preferencias de los pacientes, con respecto al cannabis medicinal o los

cannabinoides para el dolor crónico.

 

Comprender la recomendación 

 

La recomendación es débil debido al estrecho equilibrio entre los beneficios y los daños del cannabis medicinal para el dolor crónico. 

 

Refleja un alto valor dado a las mejoras pequeñas a muy pequeñas en la intensidad del dolor autoinformada, el funcionamiento físico y

la calidad del sueño, y la voluntad de aceptar un riesgo pequeño a modesto de daños en su mayoría autolimitado y transitorios.

 

Se requiere una toma de decisiones compartida para garantizar que los pacientes tomen decisiones que reflejen sus valores y

contexto personal. 

 

Se justifica la realización de más investigaciones y pueden alterar esta recomendación.

 

https://www.bmj.com/content/374/bmj.n2040